TIPOS
El término bioplástico abarca una amplia gama de polímeros, cada uno de los cuales tiene diferentes atributos en cuanto a su impacto sobre el medioambiente. No existe un único sistema de clasificación para los bioplásticos. De forma general, la Asociación Europea de Bioplásticos (European Bioplastics), clasifica estos materiales en dos categorías principales:
- Los denominados plásticos procedentes de biomasa (de recursos renovables).
- Los polímeros biodegradables que cumplen con los criterios científicos recogidos en las normas de biodegradabilidad y compostabilidad que a nivel europeo son la EN 13432 y EN 14995, ISO 17088 y su contraparte americana la norma ASTM D-6400.
Bioplásticos procedentes total o parcialmente de fuentes renovables
Comprenden tanto los bioplásticos cuyos monómeros proceden de la biomasa (almidón y celulosa), como aquellos cuyos monómeros son producidos mediante la fermentación de recursos renovables, aunque el proceso de polimerización posterior sea por vía química convencional.
Bioplásticos sintetizados por vía biotecnológica
Existen dos vías biotecnológicas para la producción de bioplásticos. El primero consiste en la obtención biotecnológica de los monómeros y polimerización posterior por vía química (ácido poliláctico-PLA). Otra vía es la síntesis integral de los bioplásticos mediante procedimientos biotecnológicos, fundamentalmente por fermentación microbiana, aunque se están contemplando a más largo plazo otras tecnologías basadas en la utilización de plantas genéticamente modificadas. Un ejemplo son los Polihidroxialoanatos (PHA).
Polímeros biodegradables sintéticos (no procedentes de fuentes renovables)
Proceden de la polimerización de monómeros obtenidos de fuentes fósiles. Por su estructura son biodegradables según las normas de biodegradabilidad y compostaje (ASTM D6400 y EN13432). Ejemplo de este tipo de materiales lo constituyen el grupo de Poliésteres alifáticos y alifáticos-aromáticos.